Este es el parque que incluye toda la zona del Lago Trasimeno -el lago más grande de la Italia peninsular-  y sus orillas. Además de ser un lugar de importancia histórica -fue escenario de la decisiva batalla de la Segunda Guerra Púnica, en la que Aníbal masacró por sorpresa al ejército romano-, el lago tiene una gran importancia desde el punto de vista naturalista. Su origen está ligado a fenómenos de origen tectónico, es decir, a los movimientos de la corteza terrestre concomitantes con el nacimiento de los Apeninos, que crearon una fuerte depresión, llenada durante milenios por las lluvias. Una característica del Lago Trasimeno es, de hecho, la escasez de ríos tributarios o desembocaduras que afectan a su profundidad, muy poco profunda (sólo 6 metros en su punto más profundo) en comparación con la de otros grandes lagos italianos. Aunque algunos pequeños arroyos alimentados por las lluvias estacionales proporcionan el suministro, no hay ningún emisario que drene el exceso de agua. Ya en época romana, para evitar inundaciones perjudiciales, se construyeron canales artificiales que desembocaban en el cercano río Nestore.

Los oasis del parque del lago Trasimeno, parcelas de aguas poco profundas cubiertas de densos cañaverales, son el entorno ideal para albergar a numerosas especies de peces, anfibios y aves migratorias. La Isla Polvese, Isla Mayor e Isla Menor están emergen del agua como pequeños tesoros de maravillas naturales y culturales por explorar. Son muchas las actividades que se pueden realizar en este paisaje encantador. Observación de aves a lo largo de las pasarelas entre los juncales, excursiones entre olivares y viñedos, largos paseos por caminos rurales que conectan pueblos llenos de historia como Castiglione del Lago o Passignano sul Trasimeno.

El río Nera, que nace en el corazón de los Apeninos de la región de las Marcas para lanzarse 116 km aguas abajo hacia el Tíber, es el séptimo río italianoen términos de caudal medio. Su fuerza y su impetuosidad han dado vida a lo largo de milenios a uno de los paisajes más fascinantes y menos afectados por la modernidad que la tierra de Umbría puede ofrecer: la Valnerina. Un valle estrecho y sinuoso que atraviesa todo el sureste de Umbría y se extiende desde la ciudad de Preci hasta los territorios de Terni al sur, Nursia y Cascia al este. El Parque Fluvial del Nera se desarrolla desde el tramo medio-inferior del río, desde el pueblo de Ferentillo, hasta el punto en que el río recibe la masa de agua que, a 165 metros de altura, cae del lecho del río Velino, formando uno de los más bellos fenómenos hidrológicos italianos, las Cataratas de Marmore. Se puede explorar el Parque Fluvial del Nera a través de sus largos carriles bici o a pie, admirando desde abajo las majestuosas montañas que rodean el valle salpicadode pequeños y antiguos pueblos, como el pueblo de Polino, con sólo 230 habitantes, o el pueblo de Torreorsina, desde el que se puede disfrutar de una impresionante vista de la cascada. Dentro del parque también se encuentra el lago Piediluco, el segundo lago más grande de la región por su extensión y gran impacto en el paisaje.

El Monte Subasio, de unos 1290 metros de altura, es un territorio antiguo y místico. Desde los primeros tiempos de la era cristiana, sus cuevas fueron el hogar de muchos ascetas y ermitaños, sus bosques fueron recorridos a lo largo y ancho por monjes que se asentaron allí a lo largo de la historia, incluyendo, por supuesto, a San Francisco. En la ladera occidentalde la montaña, apoyada en una colina, se alza de hecho la acrópolis de la ciudad de Asís, también incluida en los límites del parque. Pero la influencia antrópica y la profunda implicación con la historia humana no te deben confundir. El parque es un hermoso oasis natural con una gran biodiversidad y su conformación geológica da lugar a fenómenos kársticos característicos como el de Mortari. El parque está cubierto por senderos claramente visibles y bien conservados graciasa los cuales podrás realizar tus exploraciones con total seguridad. Muchos de ellos simplemente siguen los senderos utilizados por los primeros pobladores para desplazarse por las crestas y laderas. Así que no te sorprendas si ves restos arqueológicos, pequeñas abadías y monasterios brotando de la vegetación. Más arriba, desde las verdes praderas que emergen del bosque y cubren la cima redondeada de la montaña, la vista del valle es impresionante.

El extremo nororiental de Umbría está ocupado por el macizo del Monte Cucco, con sus 1.566 metros es uno de los picos más altos de los Apeninos Umbro-Marchigiano. Con el paso del tiempo, los movimientos de la corteza terrestre han creado en el interior del macizo, bajo los espesos hayedos, una miríada de barrancos, cavidades, túneles, que luego se llenan de agua de lluvia filtrada por las rocas. El Parque del Monte Cucco es de hecho increíblemente rico en manantiales, cursos de agua y fenómenos de erosión cárstica como barrancos y gargantas, profundas grietas en la roca por donde fluyen los arroyos que corren y actúan en espectaculares cascadas. Aunque esuno de los parques menos poblados de la región, en su interior se encuentran algunos pequeños pueblos, dedicados principalmente a la artesanía, la agricultura, la gestión de pastos y bosques. Un poco más abajo en el valle están las aglomeraciones urbanas de Gubbio y Gualdo Tadino. El parque del Monte Cucco está cubierto por una densa red de senderos superando un total de 120 km, gracias a los cuales se pueden explorar las escarpadas y salvajes maravillas que esta zona tiene para ofrecer.

Antes de llegar a Roma y convertirse en uno de los ríos más importantes y famosos del mundo, el Tíber también pasa por Umbría y su curso está protegido en gran parte por un parque regional que seextiende sobre más de 7000 hectáreas en un territorio de siete municipios.

El río ha sido navegado y habitado por hombres desde el principio de los tiempos. Gracias a ello, los romanos pudieron adentrarse en los territorios de las poblaciones umbras y estruscas y profundizar las raíces de su colonización. El territorio del parque está de hecholleno de restos arqueológicos y pueblos antiguos. Orvieto está situado cerca de esta zona y Todi tiene su centro histórico incluido en los límites del parque. La intervención y el trabajo humano no ha podido afectar una armonía establecida a lo largo de los siglos en el medio ambiente salvaje. De hecho, en este caso, el trabajo del hombre y el de la naturaleza parecen estar en simbiosis. El lago de Corbara, una cuenca artificial utilizada para la producción de electricidad, se arrastra con susapéndices dentro de los valles, formando vislumbres de paisajes extraordinarios, como la garganta del Forello. Más abajo en el valle, las curvas del río se unen para crear una reserva natural pantanosa llamada Oasi d’Alviano, también de naturaleza artificial, protegida por el WWF: uno de los puntos de mayor concentración de aves durante la temporada de migración.

Con sólo 338 hectáreas, el parque de Colfiorito es el más pequeño de la región, perono menos importante y fascinante. La zona, declarada patrimonio de importancia internacional por la Convención de Ramsar ya en 1976, está constituida principalmente por tierras de origen pantanoso. La acción sistemática de recuperación llevada a cabo por el hombre a lo largo de los siglos no ha logrado afectar el área del parque de Colfiorito, que ahora es de fundamental importancia por sus turberas, zonas pantanosas donde las condiciones de temperatura y acidez inhiben la descomposición de los tejidos animales y vegetales, favoreciendo la acumulación y compactación de la materia orgánica en la llamada turba, material precioso y versátil.  Además, su ecosistema alberga una gran variedad de flora y fauna, presente sólo dentro de este parque, como el Lirio de las Aguas Blancas o la Orquídea Acuática. La vista de este colorido mar de vegetación flotante desde sus alturas es impresionante y uno se puede  adentrar en el pantano gracias a las pasarelas de madera.

Acrónimo de Sistema Territoriale de Interesse Naturalístico y Ambiental, S.T.I.N.A.  constituye una gran área protegida que se extiende hasta la parte centro-occidental de la región. Se estructura principalmente en tres territorios homogéneos desde el punto de vista medioambiental: la Selva di Meana, un complejo montañoso cubierto de robledos en el municipio de Allerona. El Anillo de Allerona (Anello di Allerona) es un camino que cubre toda la superficie y que se puede recorrer en unas 5 horas y media. El área protegida de Melonta-Bosco dell’Elmo, un complejo montañoso que descansa a la derecha del Monte Peglia, posee un majestuoso encinar centenario. También parte del S.T.I.N.A. es el pequeño pueblo de San Venanzo con su Parque Volcánico, donde se puede retroceder 300 mil años e imaginar este territorio cuando estaba rodeado por tres cráteres volcánicos decientos de metros de ancho. El mismo Monte Peglia, recientemente reconocido como Reserva Mundial de la Biosfera por la UNESCO, conserva en su interior un yacimiento fósil prehistórico que data de hace unos 700 mil años, uno de los más antiguos de Italia.