A lo largo de la calle Via Cesia, poco después de la iglesia de San Carlos, se encuentra la Fuente de Scannabecco, que debe su nombre al podestà de Todi, de la familia Fagnani de Bolonia, que la mandó construir en 1241. Se trata de una estructura insólita y compleja compuesta por un pórtico de siete columnas con capiteles de diversas formas y decoraciones que soportan arcos de medio punto hechos de ladrillo. Tiene cuatro albercas que se comunican entre sí a través de un sistema de aliviaderos.