No lejos de la plaza principal de Corciano, Plaza Coragino, se encuentra la iglesia dedicada a Santa María Asunta. La estructura data del siglo XIII y fue originalmente de estilo gótico y luego completamente transformada, en 1870, en formas neoclásicasdiseñadas por el arquitecto Lardoni de Perugia. En esa ocasión, se añadió también el campanario, reformando la antigua torre de la ciudad, de piedra y de planta cuadrangular, que según la tradición pertenecía a los ricos señores feudales de Corciano: las familias Della Corgna y Montemelini.
El edificio presenta en el exterior una elegante fachada de piedra blanca y rosa, mientras que en el interior tiene una estructura de una sola nave con un presbiterio elevado, un ábside central y varios altares, cada uno de los cuales está adornado con obras de arte de gran importancia.
Destaca el imponente retablo que decora el altar mayor, realizado por Perugino en 1513 y que representa «la Asunción de la Virgen» y la «Bandera de la Plaga» realizada en 1472 por Benedetto di Bonfigli, que representa a la misericordiosa Virgen que protege a los habitantes de la ciudad bajo su manto.
Junto a estas dos obras maestras, hay dos altares laterales menores, dedicados al Sagrado Corazón y a Nuestra Señora del Rosario.