Antes de llegar a Roma y convertirse en uno de los ríos más importantes y famosos del mundo, el Tíber también pasa por Umbría y su curso está protegido en gran parte por un parque regional que seextiende sobre más de 7000 hectáreas en un territorio de siete municipios.
El río ha sido navegado y habitado por hombres desde el principio de los tiempos. Gracias a ello, los romanos pudieron adentrarse en los territorios de las poblaciones umbras y estruscas y profundizar las raíces de su colonización. El territorio del parque está de hecholleno de restos arqueológicos y pueblos antiguos. Orvieto está situado cerca de esta zona y Todi tiene su centro histórico incluido en los límites del parque. La intervención y el trabajo humano no ha podido afectar una armonía establecida a lo largo de los siglos en el medio ambiente salvaje. De hecho, en este caso, el trabajo del hombre y el de la naturaleza parecen estar en simbiosis. El lago de Corbara, una cuenca artificial utilizada para la producción de electricidad, se arrastra con susapéndices dentro de los valles, formando vislumbres de paisajes extraordinarios, como la garganta del Forello. Más abajo en el valle, las curvas del río se unen para crear una reserva natural pantanosa llamada Oasi d’Alviano, también de naturaleza artificial, protegida por el WWF: uno de los puntos de mayor concentración de aves durante la temporada de migración.